1)    Introducción:

Si a los datos del último estudio de CICCRA – mediante el que se concluye que se faenaron 16.230.000 millones de cabezas, que el consumo de carne por persona en Argentina es de aproximadamente 72 Kg., lo que implica una necesidad de 2,88 millones de kilogramos de carne solo para el mercado interno, que la producción total de carne fue en el 2009 de 3,5 millones de toneladas, lo que nos da un peso promedio de la res de 219 Kg. -  los combinamos con los últimos resultados productivos (Cuadro 1) podremos diagramar escenarios probables que en ganadería tendría el país en el año 2010.

Cuadro 1: Producción de terneros en el 2009.

Año	Madres    (Cabezas)	% de pariciones	Producción de     terneros      (Cabezas)
2006	22.474.553	59	13.345.215
2007	22.219.445	61	13.523.110
2008	20.815.475	60	12.569.628
2009	18.843.253	52	9.798.491 (*)

 (*) Destete en el 2010 = aproximadamente diez (10) millones de cabezas.

2)    Producción de carne manteniendo el stock ganadero:

Si consideramos un nacimiento estimado en 10 millones de terneros en el 2009 y sabiendo que en el 2009 faenamos 16 millones de cabezas, la lógica simple hace que nos preguntemos ¿De dónde salieron los 6 millones de animales que faenamos de más?;  sin dudas, de haber comido parte del stock.

En este punto vamos a calcular la producción real de carne que podemos lograr, tratando de mantener el stock ganadero. Un destete para el 2010 de aproximadamente 10 millones de terneros nos dejaría una disponibilidad de machos para engorde (Cuadro 2) de 5 millones de cabezas, de las cuales gran parte van al sistema de feed lot y un bajo porcentaje a engorde pastoril. En este caso, se parte de la premisa que la proporción de animales encerrados se sigue manteniendo, ya que si se vuelve al sistema pastoril – hecho muy probable porque con los precios actuales los márgenes son positivos – la prolongación de los días de engorde profundizaría aún más la disponibilidad de carne para el 2010.

En cuanto a las hembras, debemos descontar a los 5 millones de terneras a destetar en el 2010 las necesarias para la reposición de vacas de rechazo, quedándonos un remanente disponible para engordar de 2,15 millones, a las que le sumamos la disponibilidad de vacas de rechazo - ya sea como gorda o conserva. También en este caso partimos de la premisa que solo se va retener el porcentual que necesitamos para la reposición de vacas de rechazo, ya que si hubiera mayor retención de vientres –hecho muy probable por los márgenes en ganadería - se agudizaría la falta de carne.

De acuerdo con este esquema, con la cantidad de hacienda disponible para faenar y sin reducir el stock ganadero, la cantidad de carne a producir en el 2010 es de 2,19 millones de toneladas.

Cuadro 2: Carne disponible en el 2010 manteniendo el stock ganadero.

Destete     de terneros  en 2010	Existencia   de machos  para engordes    en  2010   (Miles de    cabezas)	Existencia de hembras para engorde     (*) (Miles de cabezas)	Vacas para faena        (**)  (Miles de   cabezas)	Total de  animales  para faena   (Miles de      cabezas)	Promedio de producción de carne por    animal   (Kg.)	Carne  disponible  en el 2010 manteniendo  el stock  ganadero    (Tn.)
10.000.-	5.000.-	2.150.-	2.850.-	10.000.-	219.-	2.190.000.-

3)    Escenario probable:

Con este conjunto de datos vamos a diagramar los tres escenarios probables. Los dos primeros, tratando de mantener el stock ganadero y el tercero (el más probable que lleve a cabo el Gobierno) es produciendo carne en base a disminuir el stock ganadero (Cuadro 3).

Cuadro 3: Escenario para el 2010.

Escenario 1:  Continuar con    el mismo   consumo e   importar carne  para compensar la la diferencia de  kilos de carne  para mantener      el stock     ganadero.	Consumo del    mercado     interno manteniendo  el consumo    per cápita     (Tn.)	Producción de  carne en el   año 2010 manteniendo el stock ganadero        (Tn.)	Diferencia que     se debería     importar       (Tn.)	Precio por tonelada  (U$S)	Costo para el país por la  mala política del Gobierno a partir del 2005   (U$S)
	2.880.000.-	2.190.000.-	690.000.-	3.000.-	2.070.000.000
Escenario 2: Disminuir el consumo interno para utilizar solo      la carne     disponible manteniendo el stock ganadero.	Producción de        carne manteniendo el stock ganadero       (Tn.)	Cantidad de habitantes	Carne disponible para consumo en el    año 2010  (Kg./persona)	Consumo por persona en el   año 2009  (Kg.)	Diferencia        (%)
	2.190.000.-	40.000.000.-	55.-	72.-	24.-
Escenario 3: Mantener el consumo interno  y producir carne     en base a     reducir el  stock ganadero.	Consumo del    mercado    interno   en el 2009   (Tn.)	Producción de       carne manteniendo el stock ganadero       (Tn.)	Diferencia que   deberíamos    compensar faenando parte     del stock       (Tn.)	Promedio de producción de    carne por  animal en 2009   (Peso de res)      (Kg.)	Cantidad de animales que se deberían faenar del stock ganadero para abastecer  el consumo     interno
	2.880.000.-	2.190.000.-	690.000.-	219.-	3.150.685.-

4)    Conclusiones:

a)      Si queremos mantener el stock ganadero en el 2010:

         - Con el actual consumo interno, el país tendría que importar 690.000 toneladas de carne.

         - Si no queremos importar carne, se debería reducir el consumo interno en un 24 %.

b)      Si no queremos importar carne o bajar el consumo interno, la única posibilidad es que sigamos consumiendo el stock ganadero – como lo estamos haciendo desde del 2005 - lo que nos dejaría una merma de 3,15 millones de cabezas (Cuadro 4) para el 2011 con respecto al 2010.

       Cuadro 4: Stock ganadero

2006	2007	2008	2009	2010	2011
58.850.817	58.281.552	55.426.699	52.378.230	48.878.230	45.728.000

c)      En este caso – producir carne en base a disminuir el stock ganadero y es lo que probablemente hará el Gobierno - estaremos muy cerca de que la relación animales vacunos por habitantes sea de 1 a 1, cuando hace 40 años era de 3 a 1.

d)     A este cálculo lo hicimos sin tener en cuenta que con los precios actuales muchos terneros se volverían a engordar a campo – con una prolongación de aproximadamente 10 meses en el engorde, lo que haría que muchos de estos terneros estén gordos el año que viene- y que pueda haber una mayor retención de hembras  lo que implicaría menos cantidad de hembras para el engorde. En los dos casos se acentuaría la falta de carne.